Parece que ya llueve menos, y coincidiendo con el final de la tercera ola de la pandemia de la pandemia, el sector inmobiliario español parece mejorar sus perspectivas de futuro en el mes de febrero, en línea con el repunte económico que se detecta, debido a la evolución positiva que han experimentado los indicadores económicos y del sector en comparación con los meses anteriores
En este sentido, los datos actualizados a 28 de febrero del último CBRE Recovery Monitor, un superindicador que agrega sintéticamente las mediciones de dieciséis variables, registra un índice de +15 en el mes de febrero, frente al registro anterior de un -5 en enero y de un +2 de diciembre.
De esta manera, se revierte la tendencia negativa que registraba el sector inmobiliario desde septiembre del año pasado y se coloca cerca de los niveles que marcaba en los meses de verano de 2020.
CBRE prevé que la recuperación consolide su senda positiva en los próximos meses, con lo que la creciente demanda de clientespotenciales podría convertirse en transacciones reales.
En este mismo sentido, también se ha constatado que la demanda tanto de oficinas como de activos industriales ha presentado una tendencia muy positiva en el mes de febrero, especialmente en los activos industriales, que han superado los niveles existentes con anterioridad a la irrupción de la pandemia.
Con más detalle, en el ámbito del trabajo se estima que la asistencia de empleados a los lugares de trabajo creció en el caso de los activos industriales hasta el 95%, un ratio muy cercano a los niveles de 100% observados en enero y febrero de 2020. De igual manera, en esta misma línea también se observa sendas mejorías tanto en el indicador de confianza del consumidor como en el índice PMI compuesto.
Para los próximos meses, se prevé que la recuperación consolide su senda positiva, lo cual sugiere que la creciente demanda de clientes potenciales, que indica el superindicador, podría convertirse en transacciones reales, aunque serán clave las mejoras significativas de los indicadores de sentimiento económico y de mercado, así como la disminución de las restricciones sobre la movilidad
