El especialista en recursos de multas Dvuelta ha habilitado una nueva web en la que pretende recoger firmas de todos aquellos que quieran oponerse al pago por uso en las carreteras españolas, que según denuncia, no está respaldado por su necesidad de mantenimiento, sino por las necesidades de financiación del Estado.
Si bien el argumento utilizado por el Gobierno es que deberían pagar quienes usan las carreteras, porque sería injusto que quienes no conducen tuviesen que contribuir a ello con sus impuestos, cabe recordar que actualmente se recaudan más de 30.000 millones de euros del sector de la automoción, en concepto de IVA e impuestos de matriculación, circulación y sobre los carburantes.
Esta cantidad serviría de sobra para financiar los 1.400 millones de euros que requiere el correcto mantenimientode las carreteras, dicen en Dvuelta. Sin embargo, apenas se dedica a ello la tercera parte en términos reales, un 10% de lo recaudado.
Además, es rotundamente falso en su opinión que quien no tiene un vehículo no vaya a contribuir con sus impuestos al mantenimiento de las carreteras, pues "los impuestos no son finalistas". No es posible que un impuesto, o peaje, o tarificación financie un capítulo concreto del presupuesto.
En realidad, todo el dinero "va a una caja común, que se llama Hacienda", y luego se distribuye según lo que determinen los Presupuestos Generales del Estado, no un decreto que establezca el pago por uso. Por lo tanto, la medida "servirá para recaudar y luego ya veremos".
Así, este especialista en recurrir multas asegura que la intención es solamente "recaudar todo lo posible para que el déficit público no se desboque más de lo que ya lo está", como viene advirtiendo la UE, que condiciona los fondos de recuperación a "una senda inequívoca de consolidación fiscal".
"Apostemos a cuánto se dedica a mantener las carreteras cuando este nuevo sablazo entre en vigor", insisten en esta empresa, para quien la medida solamente garantiza una mayor recaudación, pero no unas carreteras correctamente mantenidas.
