Se observa un aumento constante de la producción a lo largo de todo el año.
En 2017, la importación española de frutas y hortalizas frescas ha crecido un 6% en volumen y un 8,6% en valor, totalizando 3,06 millones de toneladas y 2.526 millones de euros respectivamente, según datos de la Dirección General de Aduanas recogidos por Fepex, que confirman la tendencia al alza de los últimos años.
La importación de frutas ha sido la que ha experimentado una mayor progresión, con un 6,3% más en volumen y un 10,2% en valor, ascendiendo a 1,7 millones de toneladas y 1.739 millones de euros. Destaca el incremento del 22% en el aguacate, con 221,4 millones de euros y del 42,2% en el kiwi, hasta los 219,5 millones de euros, seguidos del plátano, que ha crecido un 8,7% hasta los 160,5 millones de euros.
El crecimiento de las hortalizas ha llegado al 5,7%en volumen y al 5,2% en valor, con 1,3 millones de toneladas y 786,8 millones de euros, siendo la patata con 221 millones de euros que representan una caída del 3%, y la judía verde, con 155 millones de euros que suponen un aumento del 2%, las principales hortalizas importadas.
En el análisis mensual se ha observado un aumento constante, con incrementos interanuales de más del 10%en la mayoría de los meses, aunque el que ha registrado un mayor crecimiento ha sido el de marzo, con un 22,5%. Además, en los meses de junio y agosto se produjo un retroceso del valor importado.
Para Fepex, el crecimiento continuado de las compras de frutas y hortalizas, especialmente desde 2013, refleja un cambio de tendencia en el mercado, convirtiéndose España en un país cada vez más importador.
Se muestran preocupados, además, por la existencia de algunas frutas y hortalizas importadas, con volúmenes destacables como el tomate, con 189.000 toneladas, o la manzana, con 192.000 toneladas, que coinciden con los periodos de producción española.