El transporte y la logística a temperatura controlada se han consolidado como un pilar estratégico de la cadena de suministro, especialmente en sectores como la alimentación o la industria farmacéutica. En España, este segmento ha experimentado una transformación acelerada en los últimos años, impulsada por la digitalización, la presión por la sostenibilidad y, sobre todo, por una intensa actividad de fusiones y adquisiciones (M&A).
El mercado español de transporte a temperatura controlada se caracteriza por una elevada atomización, siendo el tamaño medio de las empresas españolas en torno a un 80% menor que las de Francia, Alemania y Países Bajos, y tres veces inferior a las italianas según un análisis llevado a cabo por Albia.
Esta fragmentación limita su capacidad de competir en licitaciones exigentes, acceder a financiación o escalar operaciones. Frente a este panorama, la consolidación se presenta no solo como una tendencia, sino como una necesidad estructural para ganar eficiencia, profesionalizar servicios, competir mejor en entornos complejos e internacionales, así como para responder a las crecientes exigencias de los clientes.
Los datos lo confirman: entre 2021 y 2024 se han registrado una media de más de 10 operaciones anuales de compraventa de compañías en el segmento de temperatura controlada, que contrasta significativamente con el número de las operaciones registradas en años anteriores a la pandemia del Covid-19, con una media de 2-3 operaciones al año.
Entre 2021 y 2024 se han registrado una media de más de 10 operaciones anuales de compraventa de compañías en el segmento de temperatura controlada.
Particularmente, en el año 2024 se registraron 14 operaciones de compraventa en transporte a temperatura controlada lo que marca un récord histórico y una tendencia que continúa en el año 2025, con casos como las adquisiciones de Arimon Logistics y TransDusan por parte de Transaez, plataforma de Everwood Capital, que refuerza su presencia en el eje Logroño-Zaragoza-Barcelona, la entrada en el mercado español del operador internacional CubeCold a través de tres adquisiciones en el eje mediterráneo (almacenaje frigorífico) o, la adquisición de Suditrans por parte de Grupo Caliche, entre otras.
El interés inversor no es casual. Este segmento ofrece márgenes superiores gracias a la especialización, la necesidad de certificaciones específicas y la creciente demanda de servicios puerta a puerta. Además, el crecimiento del e-commerce alimentario, la presión por la trazabilidad y la necesidad de infraestructuras logísticas adaptadas están redefiniendo el mapa competitivo.
Los grandes operadores, y cada vez más fondos de inversión, están liderando estas operaciones para ganar escala, ampliar servicios y reforzar su presencia geográfica.
En definitiva, el transporte a temperatura controlada en España está dejando atrás su carácter artesanal para convertirse en un sector industrializado, profesional y atractivo para el capital.
La consolidación no solo es inevitable, sino deseable, ya que supone también una solución de continuidad para empleados, clientes y proveedores ante un problema estructural del sector como es la falta de relevo generacional. El reto ahora es que esta transformación preserve el conocimiento operativo de las empresas familiares, mientras se incorporan las capacidades tecnológicas, financieras y de gestión que exige el nuevo entorno competitivo.