Ante las quejas de las estaciones de servicio de la Comunidad Autónoma, por la pérdida de repostajes ante el precio más caro con respecto a las provincias limítrofes.
El impuesto sobre hidrocarburos entra en el juego político, con los partidos solicitando la eliminación de los mismos en aquellas regiones donde no gobiernan.
Castilla y León habría dejado de ingresar 600 millones de euros durante los últimos cuatro años por la implantación del centimazo, según las cuentas esgrimidas por los socialistas.
"Se están alargando los plazos en un proceso en el que ya se han excedido los tiempos", critican desde la Asociación de Transporte de Mercancías Ciudad Real.