En Mérida, se llevará a cabo una reforma de la terminal ferroviaria consistente en el cambio del trazado que, en lugar de ir en paralelo a la N-630, irá de manera perpendicular.
La terminal contará con ocho vías, cuatro para las operaciones de entrada y salida de trenes de gran capacidad y otras cuatro para las operaciones de carga y descarga.
La recuperación económica y las medidas anunciadas por el Gobierno han conseguido que la contratación en el sector del transporte de mercancías extremeño haya crecido un 4% durante el último año.
La inversión adjudicada hasta el momento supera los 19 millones de euros, y la licitación de las infraestructuras básicas elevarán el presupuesto total de esta actuación de la primera fase hasta los 25 millones de euros.
La terminal ferroviaria que será construida en la primera fase del proyecto contará con capacidad para 11 ferrocarriles de 700 m de largo y 1.500 tn de mercancías.
Con un plazo de ejecución de 20 meses para acondicionar las primeras 60 hectáreas de la plataforma, en Extremadura esperan que la plataforme esté operativa en 2016.