Del total de toneladas gestionadas, un 10% se destinó a reutilización en el mercado de ocasión o recauchutado y el 90% restante a reciclaje y otras formas de valorización.
La última auditoria coloca en primera posición en mejoras mediambientales a la planta de Iveco en Madrid, ya que ha reducido un 37,3% su consumo energético y un 42% las emisiones de CO2.