Desde la Asociación Europa de Navieros, Ecsa, sostienen que hay que ser cautelosos con esta medida, pues la imposición de un límite de velocidad podría tener consecuencias negativas.
Entre el 2 y el 4 de octubre las terminales de Barcelona, Valencia, Castellón y Gijón han organizado distintas actividades de concienciación medioambiental.
Entre 2015 y 2016, un total de 13 empresas de la comunidad portuaria han obteniendo en total casi dos millones de euros de descuento en tasas entre ambos ejercicios.
Desde el otoño del 2011, diez camiones Volvo Bio-DME han estado funcionando de forma regular y ahora se ha comprobado que los resultados sobrepasan lo esperado. Si el diésel se reemplazara por el Bio-DME, las emisiones de CO2 se reducirían en un 95%.
Se busca poder orientar correctamente todas las inversiones, tanto las propias de la Autoridad Portuaria, como las de cualquier otra empresa que opere en la zona.
Según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente, las operaciones logísticas y de transporte son responsables del 25% de las emisiones de CO2 en nuestro país.