Francia será el primer país que se beneficie de este mecanismo, que también permitirá financiar la conversión y modernización de embarcaciones ya existentes.
El certificado EMAS es consecuencia de años de trabajo orientados a aumentar la eficacia del puerto en la prestación de servicios bajo estrictos controles ambientales.
La Federación Internacional de Trabajadores de Transporte inicia este proyecto con el que pretende establecer una hoja de ruta para lograr la descarbonización del sector.
La asociación aumentará en un 20% el número de contenedores amarillos y azules de cara a 2020 e inspeccionarán anualmente el 80% de ellos para mejorar la calidad del servicio prestado al ciudadano.