El Ministerio de Transportes aboga por introducir un concepto integral de movilidad, focalizado en la seguridad, la sostenibilidad, la cohesión social, la digitalización y la emergencia climática.
El descenso se concentra principalmente entre las de transporte privado, mientras que el crecimiento se concentra en el transporte pesado, con un comportamiento plano del segmento ligero.
Sigue el trasvase en el movimiento de camiones de las vías convencionales a las autopistas de pago, de tal modo que ya suponen el 17,8% del tráfico de estas infraestructuras.
Los tenedores del derecho de cobro no percibirán ninguna cantidad, pues la estimación del importe pendiente de pago por expropiaciones supera con creces la RPA reconocida.
José Luis Ábalos da un giro a la estructura del Departamento que dirige, para gestionar las políticas de movilidad y agenda urbana que ahora también gestiona.
Tras dos bofetadas recientes, el transporte quiere que su opinión se tenga en cuenta, precisamente cuando el Gobierno se apresta a impulsar un profundo cambio de modelo energético.
Entre las medidas más relevantes, destaca la modificación del sistema de cánones ferroviarios, que convierte a los administradores de infraestructuras en los responsables de establecer su cuantía.
Como paso previo, el Ministerio elaborará y someterá a información pública un documento de debate que habrá de culminar en la elaboración de una Ley de Movilidad.
Se realizará un análisis de la situación de la movilidad en España y del estado de la competitividad del transporte, explicando el reto que suponen para las ciudades los cambios en la movilidad urbana y metropolitana.