Vizcaya da un paso más para contar con un peaje para camiones y contrata la instalación del sistema tecnológico que permitirá su cobro, que estará listo en veinte meses.
Las Diputaciones vascas ya gestionan las competencias en transporte por carretera , que incluyen gestión de autorizaciones, competencia profesional, inspección y sistemas arbitrales.
Vizcaya empieza a trabajar en su primera autopista inteligente con la instalación de las primeras balizas conectadas, para tener en 2024 un laboratorio para probar tecnologías de movilidad autónoma y conectada.
La Diputación de Vizcaya acuerda que trabajará para poner peajes a los camiones “de manera progresiva” y buscando "la colaboración del sector del transporte por carretera”, que considera ilegal el proyecto.
Vizcaya realizará nuevas obras de ampliación a un tercer carril en la N-636, entre Durango y Arrasate, un tramo con un alto nivel de circulación de camiones y en un trazado sinuoso.
La Diputación de Vizcaya asume que sus peajes supondrán un sobrecoste para las empresas del transporte, pero se escuda en el "bien común" para continuar con el proyecto.
Vizcaya inicia los trámites para instalar un sistema de peajes para vehículos pesados en vías como la N-240, BI-625 y el Corredor de Chorierri, en las que colocaría de manera progresiva una treintena de arcos de control.