Se trata de la mayor inversión realizada en la terminal de este tipo de maquinaria y forma parte de la estrategia de renovación de flota de APM Terminals, que busca aumentar la capacidad y productividad de sus equipos.
Basado en la carretilla eléctrica ECG90-180, el nuevo equipo ha sido diseñado para ayudar a los clientes a reducir sus costes de combustible y cumplir con los más estrictos estándares de emisiones.
Las nuevas unidades se utilizarán para el movimiento de productos de acero, como chapas y bobinas, por lo que cuentan con una capacidad de elevación de 33 toneladas.
Para mejorar el mantenimiento de la batería, se ha desarrollado un sistema de gestión de la temperatura que la mantiene en el rango más adecuado, garantizando que la máquina pueda operar con normalidad.
La UTE compuesta por Agrupación Cántabra de Construcción e Ingeniería y Clothos redactará el proyecto que servirá para que el enclave cántabro cuente con una doble vía de cuatro hilos y dos anchos una longitud total de 1.950 metros.
El modelo incorpora mejoras para obtener una mayor eficiencia en el consumo del combustible, más estabilidad y maniobrabilidad, y una mayor seguridad en las operaciones.
La inversión en estos trabajos ronda los 46 millones de euros y permitirá al recinto portuario onubense ganar 500 nuevos metros de atraque con 15 metros de calado.
La Autoridad Portuaria de Málaga estima que estas nuevas instalaciones incrementarán la calidad de la oferta portuaria del recinto malagueño y favorecerán la llegada de nuevas conexiones al enclave andaluz.
Con estas nuevas grúas, la terminal del puerto norteafricano se prepara para acoger la operativa de los grandes portacontenedores de última generación.
Con estos trabajos se adaptan las grúas de la terminal valenciana al tamaño cada vez más grande de los barcos portacontenedores y, al mismo tiempo, se alarga su vida útil.
Se trata de grúas Over Super Post Panamax, similares a las que dejaron el puerto malagueño hace un año, con capacidad para operar buques portacontenedores de hasta 16.000 TEUs.
Las asociaciones de fabricantes están realizando un esfuerzo encomiable para facilitar el desarrollo de unos estándares adecuados, pero por el momento está completamente en manos de los proveedores.
Los modelos híbridos han sido una gran solución intermedia para la reducción del impacto ambiental, pero se verán superados por los eléctricos en lo que se refiere a sus posibilidades y al ahorro económico.
El grupo sigue invirtiendo en investigación y desarrollo para tratar de comprender cómo será el futuro del sector y por el momento, confía en que la electricidad será la principal fuente energética.
El modelo ha sido desarrollado por el fabricante para adaptarse a la creciente demanda de soluciones eléctricas, con un tren motor mucho más económico que su equivalente en diésel.
Fabricado sobre una plataforma de acero optimizada, este AGV puede cargar uno o dos contenedores de 20 pies, uno de 40 o uno de 45 y soporta un peso de hasta 70 toneladas.
Con esta solución, la Autoridad Portuaria de Valencia busca facilitar el tráfico ferroviario de mercancías para potenciar las conexiones con su hinterland.
Las mejoras introducidas supondrán grandes ventajas en cuestiones de fiabilidad, productividad y seguridad para las terminales que utilizan este equipamiento para la manipulación de contenedores.
Las terminales tratan de adaptarse a las nuevas necesidades de las navieras mediante la automatización y el aumento del número de grúas para la descarga desde los buques a los muelles.