La ocupación mediade los almacenes de productos congelados en España ha sido del 78,50% durante el cuarto trimestre de 2023, según datos del Observatorio del Frío de la Asociación de Explotaciones Frigoríficas, Logística y Distribución de España, Aldefe.
Sin embargo, presenta una variabilidad significativa por regiones. Las Islas Canarias muestran la tasa más alta de ocupación, con un 85,74%, seguidas muy de cerca por la región Centro, con un 85,12% y la Comunidad Valenciana con un 84,24%.
Le sigue Cataluña, que registra una ocupación del 78,71%, cercana a la media nacional. Las cifras disminuyen en Asturias y Galicia con un 77,81%, mientras que el Norte y el Sur presentan las tasas más bajas, siendo 69,26% y 67,53% respectivamente.
Estos datos reflejan cómo la distribución geográfica y, posiblemente, la infraestructura logística y la demanda local influyen en la ocupación de estos espacios. Por su parte, la facturación del sectorse ha situado en 112,9 millones de euros, lo que implica un incremento del 8%.
Esto refleja una progresión ascendente, que parece reflejar una combinación de factores, incluyendo la mejora en los servicios de valor añadido y el aumento general de los precios. En concreto, la facturación por metro cúbico ha experimentado un crecimiento notable desde el primer trimestre de 2021, pasando de los 6,67 euros en aquel momento a los 16,13 euros en el cuarto trimestre de 2023.
El indicador de toneladas manipuladas por metro cúbico refleja una tendencia más irregular, iniciando con 0,22 el primer trimestre de 2021, y volviendo a estabilizarse en esa cifra en los últimos dos trimestres de 2023 tras experimentar variaciones a lo largo de los periodos.
En cuanto al número de empleados por cada 10.000 m3, se observa una tendencia clara al alza, comenzando con 3,12 empleados y aumentando hasta 5,57 en el último trimestre de 2023.
En el reparto por categorías de los productos demandados, destacan los pescados, con el 19,59%, seguidos a un punto de las carnes con el 18,56% y de los productos elaborados, con la misma cifra del 18,56%.
Después, se halla el grupo de las verduras, con el 16,49% y el segmento de pan y varios, con el 14,43%. Completan la lista los lácteos, con el 9,28%, y los productos farmacéuticos, con el 3,09%.
Tendencias
Desde la Asociación, explican que las innovaciones en tecnologías de congelación están remodelando el sector alimentario, pues no solo acortan tiempos de producción y aumentan la eficiencia energética, sino que también mejoran la calidad de los productos.
Por ejemplo, tecnologías como la congelación rápida y la congelación criogénica preservan el sabor y la textura de los alimentos, permitiendo ciclos de producción más rápidos y una respuesta más ágil a las demandas del mercado.
Este progreso tecnológico ofrece capacidades aumentadas para garantizar unas operaciones ininterrumpidas, destacando la importancia de las inversiones en tecnología para mantener la competitividad e impulsar las sostenibilidad en la industria alimentaria.
Además, la integración de plataformas inteligentes mejora la eficiencia operativa y la toma de decisiones basada en datos, subrayando el papel de la innovación en la evolución hacia una producción de alimentos más sostenible y consciente.