Los vehículos comerciales ligeros nuevos, de hasta 2.610 kilos de peso y 3,5 toneladas de carga, aún deben recortar sus emisiones un 18,5 % para cumplir con los límites obligatorios impuestos por la UE para 2020, según ha informado la Agencia Europea del Medio Ambiente.
La emisión media de las furgonetas nuevas asciende todavía a 180,3 gramos de CO2 por kilómetro, aún por encima de los 175 g/km marcados para 2017 y los 147 g/km para 2020. Estas metas, similares a las que existen para turismos, fueron adoptadas por la UE en 2011.
Cada fabricante tiene un objetivo individual, calculado en función del parque de vehículos registrado a su nombre, pero en su conjunto deben alcanzar una nivel medio de no más de 147 grs. de CO2/km para furgonetas antes de 2020.
Para reducir las emisiones de manera significativa, los fabricantes tendrán que mejorar la tecnología de sus vehículos y vender modelos más eficientes. "La buena noticia es que hay un enorme potencial para el uso de las nuevas tecnologías", han asegurado desde la Agencia Europea, en referencia a los vehículos eléctricos o híbridos.