El gas de origen renovable, procedente de la descomposición anaerobia de residuos y contribuye a la economía circular mejorando la gestión medioambiental de residuos orgánicos.
La empresa desarrolla desde plantas de GNL con capacidades de 20.000 tn a 85.000 tn, a pequeñas mini plantas de GNL que son particularmente adecuadas para la licuefacción de biogás.
Con este combustible se reducen las emisiones hasta un 70% con respecto al motor diésel, mientras que el vehículo conserva la potencia alcanzando los 320 CV y un par de 1.356 Nm.
La utilización del gas licuado como combustible permite que el nuevo camión Volvo sea entre un 30 y 40% más eficiente, lo que se traduce en un ahorro de combustible del 25%, y en una importante reducción de las emisiones de CO2.
El gas natural licuado, es una alternativa viable, con menores emisiones frente al diésel, pero que precisa la creación de las infraestructuras necesarias para su puesta en marcha en Europa.