Desde Bosch, recuerdan que es primordial que el conductor sea consciente de la necesidad de una conducción segura, especialmente con un parque automovilístico tan envejecido.
La multinacional lleva a cabo un proyecto con Repsol y Rhenus para utilizar el HVO en dos camiones que hacen un trayecto diario de ida y vuelta entre el hub de Rhenus en Irún, la fábrica de Bosch en Aranjuez y el almacén central de Bosch Fabrica Madrid.
Se pretende disminuir la congestión y los accidentes, reducir el consumo de combustible y las emisiones de CO2, aumentar la flexibilidad de uso de los vehículos y contrarrestar la escasez de conductores.
Su intención es que pronto, en todas los puntos de recarga de la compañía en Alemania, estén disponibles los combustibles sintéticos y renovables para los vehículos de reparto.
Su utilización permite a los trabajadores localizar componentes ocultos rápidamente y recibir instrucciones de trabajo o información sobre las herramientas especiales necesarias, integradas en la imagen real.
Los grupos motrices desarrollados por el conglomerado alemán se pueden adaptar para su uso en vehículos comerciales de entre dos y 7,5 toneladas de MMA.