A diferencia de la huelga desconvocada en agosto, no está relacionada únicamente con las labores de la estiba, sino también con otros servicios comerciales y trabajadores.
Los próximos días, en el territorio galo, coinciden las protestas de los sindicatos por el cambio en las pensiones y de las empresas por los impuestos.
Las empresas de transporte y logística catalanas esperan una alta incidencia en una jornada, dado que las movilizaciones coinciden con diversas convocatorias separatistas.
A la espera de que se decreten los servicios mínimos, los estibadores darán servicio a los barcos de turistas que lleguen al puerto catalán, además de los que transporten productos perecederos o materiales sensibles.
El comité de empresa reclama el mantenimiento de la jornada semana de lunes a viernes y amenaza con convertir la huelga en indefinida si no se alcanza un acuerdo.
Con esta medida, la central sindical presiona para que los Ministerios de Fomento y de Hacienda den el visto bueno al preacuerdo alcanzado con el administrador de la infraestructura ferroviaria.
Las diferencias existentes en la negociación de las condiciones de subrogación del personal en el convenio colectivo sectorial llevan a esta convocatoria de huelga para los próximos 21 y 24 de abril.