Un estudio elaborado por Transyt señala los requisitos, retos y posibles importes para la implantación de una tasa por uso en las carreteras españolas.
La Diputación Foral de Guipúzcoa enviará su proyecto de peajes para el transporte de vehículos pesados a las Juntas Generales, para su debate político y votación, pese a no contar con los apoyos suficientes para sacarlo adelante.
El sistema que promociona la Diputación de Guipúzcoa, bautizado como Arkupe, empezaría a operar en octubre de 2014 en la N-1, A-15, N-121-A y GI-632, y se basa en el sistema electrónico de cobro a través de pórticos.
Aunque según Fomento en estos momentos no está prevista la implantación de pago por uso en la red de carreteras estatales, se deja la puerta abierta a alguna fórmula para los camiones de mercancías en virtud de las nuevas obligaciones reguladas en la directiva 2011/76.
El secretario de Estado de Fomento, Rafael Catalán, es partidario de ir trasladando al ciudadano el concepto de que hay que mantener las infraestructuras y "que su conservación debe asumirse por quienes las usan".
El comisario europeo de Transportes también considera mejor un sistema de peaje en función de la distancia recorrida, por ser más “eficiente y más justo que el sistema de viñeta, que puede ser una herramienta de transición".