Con los más de 4.600 m de diques y 2.800 m de muelles de esta nueva fase y tras una inversión pública de 1.300 millones de euros, el puerto marroquí tendrá capacidad para nueve millones de contenedores una vez funcione a pleno rendimiento.
La plataforma será capaz de procesar el equivalente a 30.000 operaciones para el transporte nacional e internacional, que se gestionarán en un entorno seguro.
Este importante impulso se debe principalmente al aumento de los tráficos con destino a los países africanos, hacia donde se dirige el 35% de la mercancía que pasa por el puerto marroquí.
Desde la naviera reconocen que un reducido número de rutas han sufrido un impacto significativo en el tiempo de tránsito, aunque poco a poco están volviendo a la normalidad.
El puerto marroquí ha experimentado un aumento del 10,2% en el tráfico de contenedores y de un 8,6% en el tráfico ro-ro de camiones TIR con respecto al primer semestre de 2016.
El puerto marroquí ha registrado un total de 765.647 TEUs en los tres primeros meses del año, gracias a la puesta en marcha de nuevos servicios y al conflicto de la estiba en los puertos españoles.