El operador ferroviario ha recibido peticiones de un total de 670 trabajadores para sumarse al expediente de regulación de empleo voluntario y universal abierto en la compañía.
Esta reducción es inferior a la planteada inicialmente de 600 trabajadores, y representa un 3,4% del total de la plantilla, que está formada por un total de 14.000 empleados.
Un total de 15.156 trabajadores se vieron afectados por despidos colectivos entre enero y noviembre de 2013, a través de una suspensión de contrato o reducción de jornada laboral.
La empresa de paquetería ya presentó en 2009 en España un ERE que afectaba a un máximo 285 trabajadores, el 15% de la plantilla, de los 1.900 empleados con los que contaba entonces.
La propuesta inicial de Renfe, además de los 600 trabajadores y de la indemnización legalmente establecida de 20 días por año trabajado, la operadora se guardaría la potestad para denegar o retrasar la solicitud de adhesión al ERE de la persona solicitante, según ha informado CCOO.
La propuesta supone duplicar la cifra inicial de 300 trabajadores con respecto a lo adelantado por el presidente Gómez Pomar en su comparecencia de noviembre en la comisión de Fomento del Congreso.
Esta reunión ha servido para preparar la comisión negociadora para el ERE, en donde estarán representados cinco sindicatos, CCOO, UGT, CGT, SCF Y SF, y para informar de los requisitos de la ley para realizar el ERE.