La capacidad y la demanda de servicios de carga aérea internacional vuelven a retroceder en febrero, aunque a menor ritmo del que mostraban en los dos meses anteriores.
Durante el pasado mes de enero ha vuelto a caer la demanda en el segmento de carga aérea internacional, especialmente en vuelos puros de carga, a medida que se recupera la capacidad, principalmente en las bodegas de servicios de pasajeros.
Desde primeros de marzo se ha iniciado la implantación del nuevo sistema Placi de carga aérea y doce países de la Unión Europea no han iniciado los preparativos, lo que dificulta la gestión aduanera de estos envíos.
Según Iata, la demanda y la capacidad global de carga aérea ha terminado 2022 a la baja, pero cerca de los niveles de antes de pandemia y con pesimistas previsiones para 2023.
Nuevo descenso en la demanda global de servicios de carga aérea en noviembre por la reducción en los pedidos para exportación, así como por una menor confianza de los consumidores.
La carga aérea mundial ha recuperado terreno en agosto con gran resilencia por el aumento del comercio internacional, pero en un entorno de señales económicas contadictoras.
Iata desarrolla una calculadora de emisiones para servicios de carga aérea que probará con Etihad Cargo antes de lanzarla para toda la industria en 2023.
La carga aérea mundial sigue sin recuperar los niveles previos a la pandemia, con la demanda flojeando durante el pasado mes afectada por un menor volumen de pedidos a nivel global y la invasión rusa de Ucrania.