En previsión de un año de grandes tensiones geopolíticas y económicas, lo más recomendable es observar con detalle el mercado para tomar las decisiones adecuadas y firmar contratos con condiciones más ventajosas.
El índice para las exportaciones de Estados Unidos ha crecido un 8%, mientras las importaciones europeas han alcanzado un nuevo récord, tras aumentar un 3,9%.
Desde que llegó al mercado la primera generación de grandes portacontenedores de Maersk, otras navieras pensaron que era la manera más económica de trasladar la carga.
La puesta en marcha de las nuevas alianzas ha transformado por completo el mercado, en el que China seguirá manteniendo un papel destacado dado que las mayores construcciones se realizan en sus astilleros.
El índice para las importaciones europeas ha caído un 1,1% hasta los 109,36 puntos, mientras que para las exportaciones se ha mantenido prácticamente estable.
Algunas cargas deben ser transportadas en buques debido a su volumen o a cuestiones de seguridad, mientras que otras deben ser enviadas en avión, especialmente si se trata de productos perecederos.
La industria podría plantearse adoptar un nuevo mecanismo de costes adaptado a los movimientos del mercado, para reducir la presión en las relaciones de las navieras y los cargadores.
Dado que a principios de octubre se iniciarán las fiestas de la 'Golden Week' en China, aún tienen tiempo de aplicar al menos una ronda más de aumentos antes de que empiece oficialmente la temporada baja.