Los tráficos de mercancías del puerto de Tarragona suman más de 19 millones de toneladas entre enero y julio de 2023, un 3,7% más que en el mismo tramo del año pasado.
El puerto de Tarragona proyecta una zona logística para actividad crucerística ubicada en una explanada adyacente a la nueva terminal de cruceros del muelle de Baleares.
El puerto catalán cerró el primer semestre de 2023 con un total de 16,26 millones de toneladas movidas, lo que supone un aumento del 1,2% respecto al mismo período de 2022.
Según una reciente encuesta elaborada por el Eurecat-Centro Tecnológico de Cataluña, los gastos realizados por los cruceristas han aumentado en la mayoría de los conceptos.
La mayoría de las franjas horarias ya no presentan retenciones, excepto al mediodía y por la tarde, de lunes a viernes, pero se han establecido igualmente nuevas medidas.
El puerto de Tarragona trabaja en su plan estratégico para el período que va de 2024 a 2028 y que servirá para diseñar las líneas de actuación futuras en el enclave.
Las actuaciones de esta fase incluyen las conexiones ferroviarias con Adif, la instalación de vías, elementos de seguridad y comunicación, pavimentación, estructuras y electrificación.
La entidad portuaria reúne a la comunidad portuaria para acelerar los proyectos sostenible, subrayando que la colaboración público-privada es la clave para la descarbonización.
Con 203 movimientos de trenes en el mes de mayo, las cifras se acercan al mejor resultado registrado en los últimos cinco años, pues hay que remontarse a junio de 2018 para obtener una actividad superior.
El puerto de Tarragona maneja tres ofertas para desarrollar un nuevo proyecto de electrificación para que las grúas que llevan a cabo labores de estiba en la zona sur del muelle de Castilla dejen de funcionar con motores de combustión.