El astillero marinense de Nodosa es el que cuenta con la mayor cartera, con un total de nueve contratos que suponen el 34,6% del total firmado en España.
En 2013, se estableció que las subvenciones deberían devolverlas los inversores que financiaron la construcción de los buques, pero no los armadores ni los propios astilleros.
En los últimos tres años los contratos en construcción o ya finalizados en los astilleros gallegos suman 3.160 millones de euros, con la previsión de mantener este buen comportamiento en el futuro.
El astillero español es actualmente la única empresa naval que compite en los tres mayores programas internacionales de fragatas que se están desarrollando en el mundo.
Desde septiembre de 2017, se han incorporado al mercado embarcaciones con capacidad para 986.000 TEUs, muy por encima de los 361.000 TEUs entre enero de 2016 y agosto de 2017.
El puerto de Huelva ha intentado en repetidas ocasiones negociar con Cotnsa, a la que finalmente ha tenido que comunicar la caducidad de la concesión que tenía por 10 años, hasta 2023.
Se ha abierto el plazo para solicitar nuevas subvenciones para investigación, desarrollo e innovación en el ámbito de la construcción naval, así como para tipo de interés de los créditos para la construcción de buques.
El Foro Marítimo Vasco, junto a la ingeniería Sisteplant analizará los retos que supone la fabricación avanzada, la digitalización y los nuevos modelos de negocio.