Las navieras de la alianza 2M han decidido rescatar al mercado con la suspensión a finales del mes de septiembre, del servicio AE2/Swan, donde utilizaban buques de más de 19.000 TEUs.
Entre las medidas más inmediatas, se pretende actualizar el logo de la marca para identificarla con la naviera danesa, aunque los servicios que lleva a cabo seguirán siendo operados por la filial Damco.
TradeLens permite que varias empresas colaboren estableciendo un único punto en el que visualizar la transacción, por lo que garantiza la privacidad, la confidencialidad y los detalles de la misma.
La cooperación proporcionará nuevas oportunidades a los clientes, que podrán acceder a un producto mejorado, incluyendo una línea directa desde la costa este de Estados Unidos hacia Tailandia.
Desde la naviera, aseguran que quieren continuar con esta cooperación estratégica, pero las últimas decisiones adoptadas indican que la relación con Maersk y MSC es más bien tirante.
Conscientes de que los precios seguirán bajo presión, algunos operadores están evaluando su catálogo de servicios para determinar qué conexiones son rentables y cuáles prescindibles.
Las navieras no han tenido mucho éxito al tratar de transferir los costes extra a los cargadores, como ya ocurrió con el establecimiento de las Áreas de Control de Emisiones de Azufre.
El buque, consignado por Marítima del Mediterráneo, había llegado procedente del puerto alemán de Bremerhaven a la instalación, que ha abandonado rumbo al puerto de Suez, en Egipto.
Con motivo del Día Global de la Seguridad, se pretende impulsar una producción segura entre los trabajadores de las cinco unidades de negocio de la división Transport & Logistics.
Las congestiones en los puertos y las condiciones climatológicas adversas han tenido tradicionalmente un impacto negativo sobre la fiabilidad de los servicios entre Asia y Europa.