La Iru celebra que la Comisión Europea reconozca que el transporte por carretera está entre los sectores con mayor escasez de profesionales de la economía de la UE.
En 2024 se han suscrito 204.999 contratos de trabajo para conductores de camión en España, un 0,3% menos que en 2023, con fuertes diferencias en función de si los chóferes son asalariados o autónomos.
La contratación de conductores de camión cae a plomo casi un 22% entre noviembre y diciembre, con descensos tanto para chóferes asalariados, como para autónomos.
Tráfico ya tiene abierto el acceso a la plataforma telemática para que las empresas de transporte puedan consultar la vigencia y los puntos de los permisos de conducir de sus conductores.
Comisiones Obreras carga duramente contra el Gobierno y UGT por la falta de coeficientes reductores para la jubilación de los conductores, pese a que se habían comprometido a tenerlos regulados en febrero.
El transporte asturiano estima que faltan 600 conductores profesionales en la región, algo que provoca que haya camiones parados y que las empresas no puedan crecer.
Los sindicatos europeos denuncian posibles prácticas de explotación a conductores zimbabuenses contratados por Hegelmann y que habrían parado en diversas áreas de servicio de Alemania, Italia y Francia.
Las autopistas ferroviarias ofrecen una alternativa para la falta de conductores de camión, pero su escaso desarrollo y su propio planteamiento político como rival de la carretera provocan la desconfianza de los transportistas.
Fenadismer defiende que el incremento del salario mínimo ayuda a armonizar los salarios de los conductores de camión ya que algunos convenios provinciales tienen remuneraciones por debajo del umbral de los 1.184 euros al mes y deberán incrementarse.