Las navieras se focalizan en aprovechar los niveles actuales de los fletes, especialmente en el segmento spot, y el cierto repunte de la demanda, más que en subir tarifas., mientras consolidan la tendencia a la baja en sus omisiones de servicio.
La crisis del mar Rojo ha afectado significativamente a la capacidad en las rutas que cruzan el Pacífico, y bastante menos a las establecidas entre Asia y Europa.
El desvío de las rutas por el conflicto bélico en el Mar Rojo implicará viajes más largos y velocidades más altas, con un mayor consumo de combustible que se reflejará inevitablemente en los fletes.
En el mes de agosto se ha registrado un imperceptible deterioro en el ajuste de los principales servicios marítimos internacionales a sus tiempos fijados, aunque sigue en mejores niveles que hace un año.
Tras el pico alcanzado en mayo, el ajuste de los servicios marítimos a los tiempos de tránsito fijados por las navieras ha permanecido estable en julio.
Trece de las catorce principales navieras del planeta han vuelto a mejorar los ajustes de los horarios de sus servicios a la planificación establecida el pasado mes de marzo.
Durante el pasado mes de febrero se detecta una leve mejoría de la fiabilidad de los servicios marítimos, con aumento de los indicadores de puntualidad de las principales navieras en el mes.
La fiabilidad de los servicios marítimos retrocede al comienzo de 2023, dado que todas las grandes navieras son menos puntuales en sus rutas que en diciembre del año pasado, aunque ha mejorado los retrasos medios en las escalas.