Los niveles de precios que hace pocos años hubieran sido noticia ahora corren el riesgo de convertirse en la norma habitual en un mercado que se encuentra al rojo vivo.
El crecimiento de las tasas de los contratos entre el Lejano Oriente y el norte de Europa es muy similar al observado en las líneas entre el norte de Europa y la costa este de EEUU.
Un nuevo cierre en China o una huelga de la estiba en la costa oeste de Estados Unidos podrían tener graves consecuencias para el mercado del transporte marítimo.
Aunque podrían desarrollarse de manera fluida, también existe el riesgo de que se produzcan nuevas disrupciones, al tener que llegar a acuerdos sobre ciertos temas polémicos.
Las navieras siguen estando en buena posición de cara a las negociaciones de los contratos a largo plazo, pues todavía siguen obteniendo grandes recompensas de la situación del mercado.
Dada la debilidad de la demanda a nivel mundial, es poco probable que las tasas 'spot' en el Mediterráneo continúen funcionando tan bien como lo han hecho y se espera que vuelvan a caer.