Las navieras continúan en una posición muy fuerte de cara a las negociaciones, pues pese al descenso, las tasas de los contratos a largo plazo siguen creciendo respecto al año anterior.
Las tasas a largo plazo para las rutas principales se encuentran en niveles récord, mientras que las tasas 'spot' se han ido consolidando a lo largo de los últimos tres meses.
La cadena de suministro seguirá viéndose afectada por retrasos del lado de China, mientras continúan los problemas para mover contenedores en los puertos de la costa oeste de Norteamérica.
Las tasas de carga se han mantenido en niveles elevados no tanto por el crecimiento de los volúmenes, sino por las constantes disrupciones en la industria.
Se han reducido las tasas en los flujos del Mar negro y el Báltico, ya que el comercio con Rusia y Ucrania se encuentra detenido por las sanciones y por la decisión de muchos operadores.
La fiebre de las navieras por incorporar más y más buques, ya sea mediante compra o a través de fletes a largo plazo, ha incrementado sustancialmente sus costes operativos.
A pesar del descenso, las navieras siguen manteniendo su posición dominante, por lo que un gran número de cargadores se están viendo obligados a recurrir al mercado 'spot'.
Probablemente algunas navieras ofrezcan contratos a precios más bajos, pero exigirán a los cargadores aumentar la duración del acuerdo o ampliarlo a otros ámbitos, como la logística.