La prisa por encargar mayores contenedores ha provocado un exceso de capacidad que hará muy difícil mantener una tasas rentables para el transporte marítimo.
El fortalecimiento de las relaciones contractuales entre Hamburg Süd y los miembros de la alianza Ocean Three invitan a pensar en una integración de la naviera alemana en la misma.
Tres factores han motivado la reducción en el consumo de combustible; la navegación lenta, las innovaciones en la industria y las restricciones impuestas por los gobiernos.
La incapacidad de los operadores para mantener los precios altos cuando peligra la plena ocupación de los portacontenedores es el principal motivo de este descenso.
Los cargadores y el descenso del petróleo han contenido los fuertes recargos que las navieras pensaban aplicar para paliar el sobreprecio del combustible bajo en azufre.
Desde hace dos décadas, Maersk ha venido liderando el tamaño de los portacontenedores, mientras sus competidores, motivados por los buenos resultados del operador, lo han emulado.
Las navieras han subido ligeramente la velocidad en sus tránsitos, si bien la introducción de 42 nuevos mega-portacontenedores en los próximos seis meses presagia que la navegación seguirá siendo lenta.
Los cargadores disponen de un amplio abanico de ofertas para realizar sus envíos marítimos desde Asia a Europa, oferta que se temía que disminuyera con las nuevas alianzas de portacontenedores.